Ayer leía en Linkedin, que la búsqueda de créditos personales para el consumo de navidad se había incrementado en un 22% en relación al año anterior, así que busqué el artículo para completar la información.

El inicio del artículo dice así:

Las familias españolas han incrementado en un 22% sus búsquedas de préstamos personales para poder hacer frente a la Navidad con más inflación de las últimas cuatro décadas y poder atender el ritmo de gasto habitual en esta época del año

fuente de la noticia
Compras Navidad

¿Cuánto estrés te producen estas compras compulsivas? Puedes minimizar esta sobre estimulación

Sin intención de crítica, si me gustaría aportar una breve reflexión:

La felicidad no está en las fiestas de navidad, ni en los regalos, ni en el lujo de lo que consumas o la cantidad de compras que puedas realizar.

La felicidad está en tu interior y en la capacidad de conectar con otras personas desde la sinceridad y la bondad, amigos, familia etc.

Eso significa que no me gusta la fiesta ¡pues claro que no!

Hago esta reflexión porque casi siempre ponemos el foco en lo externo, lo que puedo comprar, lo que puedo figurar que tengo a través de una gran comida, una gran cena, un lujo aritificial.

Si ese lujo o no lujo, sino extra, que no juzgo en absoluto, sientes que lo «necesitas» para sentirte bien, entonces no hay lujo suficiente en el universo que pueda calmar tu necesidad.

Es muy triste que tengamos que estar sometidos a la presión de un consumo sin límites, a vivir en cuotas de suscripción constantes y que además nos lo vendan como imprescindible para encontrar esa satisfacción que no somos capaces de encontrar de otras formas.

Te invito a reflexionar, para decidir desde la consciencia y libertar, no desde la sobreestimulación y la rueda automática que estimula tu cerebro a ir a por más y por más.

Primero las ofertas previas a navidad que no te puedes perder, después las de las propias navidades y de reyes, que no puedes dejar pasar y un poco más allá la bajada de enero y la frustración de lo efímero y consumido.

Bueno como dije al inicio de este post solo me sorprendió la noticia y creí que podía compartir contigo esta reflexión.

Y para finalizar voy a compartir algo más «mi regalo de navidad», y no es más que un breve cuento que va en la misma línia de la reflexión y se tituta así:

¿Qué necesito?

Un maestro se desplazó junto a un grupo de monjes a la gran ciudad desde el monasterio para participar en unas jornadas sobre meditación y desapego a lo material.

En ella el maestro habló de lo fácil que es vivir con poco, sin lujos, sin las necesidades impuestas por el consumismo desmedido.

Contó que él apenas tenía muebles o ropas y era muy feliz.

Después de acabar las jornadas, el maestro y sus alumnos se fueron al aeropuerto para tomar el avión de regreso a su ciudad. Como tenían aún 3 horas libres, decidieron entrar en un centro comercial, la mayoría de ellos nunca había estado en ninguno.

Pasearon por los pasillos observando todos los productos que les rodeaban y cuando ya había transcurrido más de una hora decidieron que era momento de irse, pero no encontraron al maestro por ningún lado.

Finalmente lo descubrieron yendo por los pasillos, tocando la mayoría de los objetos, examinándolos, interesándose por ellos…. Incluso llegó a preguntar a algún vendedor por el precio o utilidad de los mismos.

Asombrados por aquel comportamiento, ninguno se atrevió a decir nada y lentamente se dirigieron a la salida para esperarlo allí.

Cuando ya apenas faltaban unos minutos para embarcar observaron que el maestro salía tranquilamente del centro comercial y se dirigía a ellos.

Bien hermanos, se ha hecho un poco tarde, creo que ya es hora de marchar hacia casa, les dijo.

Todos se quedaron en silencio. En realidad, ninguno de los alumnos se atrevía a decir nada, pero no entendían que justamente él hubiera caído en las redes del consumismo.

Finalmente, uno de ellos, el más joven, se atrevió a hablar.

Maestro – ¿puedo hacerle una pregunta?

-Claro, adelante.

– ¿Cómo es que usted, que cultiva la austeridad, ha estado tanto tiempo observando todo lo que había allí dentro?

¡Es que me he quedado maravillado de todas las cosas que existen y que no necesito!

 

Bueno con esta respuesta se resume un poco todo lo que he compartido desde el inicio de este artículo.

 

¡Que las navidades no hipotequen tu vida!

#reflexion #compras #consumo #navidad

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